viernes, 13 de julio de 2012

UN PRECIO

-Todas las personas tienen un precio.
+¿Ah si? ¿Y tú por cuanto te vendes?
-Pues yo me vendo por unas cuantas sonrisas de esas de lado, de las que enamoran, cuatro besos de los que te dejan sin aliento y un para siempre.
+ Mmm... yo te puedo pagar la sonrisas los domingos cuando despiertes en mi cama, más guapa todavía que si te hubieras arreglado. Los besos los lunes para que se te hagan menos odiosos, los martes para que sigas acordándote de mí, los miércoles, jueves y todos los días, hasta que se me gastes, mi amor. Respecto al para siempre, no te lo puedo prometer ahora, pero lo podemos ir negociando durante el resto de nuestras vidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario